Héctor Pérez, director del Magíster en Dirección y Gestión Estratégica en Salud, analiza el panorama laboral actual y la masificación del teletrabajo como consecuencia del coronavirus.
Héctor Pérez, director del Magíster en Dirección y Gestión Estratégica en Salud.
“Desde que llegó el COVID-19 a nuestro país, hemos escuchado que se repiten las siguientes palabras para referirse al ámbito laboral: incertidumbre, desempleo, angustia, temor”.
“Indudablemente las relaciones laborales han cambiado sustancialmente, lo cual exige que las empresas y sus colaboradores puedan lograr acuerdos que vayan en beneficio mutuo y, principalmente, bajen el nivel de inseguridad que tiene la mayoría de los trabajadores frente a esta crisis”.
“Hoy, la autoridad sanitaria nos ha obligado a confinarnos en nuestros hogares para nuestra protección, la de nuestras familias y del entorno. Además, ya es realidad la nueva Ley del Teletrabajo que, sin duda, deberemos aprender a interpretar y -lo más difícil- aplicarla, tanto la organización como los colaboradores que tendrán que adecuarse a este cambio”.
“Muchas veces decimos que cambio es pasar de un estado a otro, pero para mí tiene un componente importante: la voluntad de hacerlo. Créanme que esto es lo más difícil, porque todos tenemos resistencia al cambio. Entonces, ¿cómo enfrentamos esta situación?”.
“A mi juicio, son claves los buenos y expeditos canales de comunicación que deben tener las organizaciones con sus colaboradores en todos sus niveles, lo que ayudará significativamente a disminuir los dañinos rumores”.
“Más allá de la situación de emergencia sanitaria que enfrenta nuestro país, las organizaciones deben ser capaces, dentro de lo posible, de cuidar a sus colaboradores, ya que esta emergencia pasará y debemos ponernos de pie a la brevedad. Y, sin duda, un pilar fundamental seremos nosotros, y en la medida que logremos esto, a partir de medidas consensuadas por ambas partes, lograremos un camino menos traumático”.
“La Ley N° 16.744 de Accidentes Laborales da cobertura al colaborador que se desempeña en modalidad a distancia o teletrabajo, lo cual es una tranquilidad para los colaboradores y sus familias. Para ello, es fundamental que las áreas de Personas de las organizaciones den a conocer esta ley con todos sus detalles”.
“Estamos viviendo grandes cambios sociales y culturales, lo que exige que las organizaciones. en conjunto con sus colaboradores, se adapten rápidamente. Por ejemplo, nuestra Universidad decidió implementar las clases remotas tanto en pregrado como postgrado, lo que ha sido un gran desafío para docentes y estudiantes, pero que hemos desarrollado con creatividad e innovación, competencias fundamentales para los profesionales de hoy”.
“Aprovecho de invitarlos a sumarse a este nuevo desafío que es el teletrabajo, que cambiará la forma de relacionarnos; y, lo más importante, que no se pierda el sentido de pertenencia a la organización. Aquí, las áreas de Personas y los líderes de las organizaciones serán pilares fundamentales durante este nuevo proceso”.