El desafío para el comercio minorista es identificar el formato que permita mostrar sus productos y servicios con los medios disponibles.
El comercio electrónico estaba teniendo un razonable crecimiento en nuestro país, pero los acontecimientos que han ocurrido desde octubre del año pasado han hecho que hoy se vuelva más indispensable para concretar ventas en el comercio.
Esta nueva forma de vender se vuelve aún más necesaria para trabajar en aquellas comunas en cuarentena. Por lo tanto, y ante las festividades patrias que se acercan, el comercio en sus distintas formas debe buscar formas para hacer llegar sus productos y servicios a los consumidores. Esto no sólo incluye el delivery propiamente tal, sino también difundir sus productos de manera adecuada.
Obviamente las grandes empresas de retail llevan la delantera, con páginas web atractivas, app para acceder desde celulares y un seguimiento de los despachos monitoreado por el mismo cliente. Son las pequeñas empresas las que quedan al debe en ofrecer condiciones más o menos similares.
El interés y necesidad de la población por la compra a distancia quedaron de manifiesto en el Cyberday, evento de ventas online organizado por la Cámara de Comercio de Santiago y que tradicionalmente se realiza en mayo y noviembre. En esta versión hubo una gran adhesión de empresas, superando las 500 marcas.
Y es que los resultados de los cyberday anteriores han sido muy positivos para las empresas adheridas. En esta oportunidad las cifras mejoraron, pues durante las primeras 12 horas las transacciones se duplicaron respecto a la versión del 2019, alcanzando los US$70 millones en ingresos, un 60% más que el año pasado (Fuente: CCS).
Esta iniciativa se ha extendido informalmente a empresas pequeñas, que han creado también ofertas especiales para estos días, como una forma de atraer clientela. El desafío para el comercio minorista es identificar el formato que permita mostrar sus productos y servicios con los medios disponibles.
Las redes sociales hoy son una tremenda herramienta de difusión, de bajo costo, para darse a conocer dependiendo del público al que se quiere llegar. Y, por otro lado, surge la posibilidad de asociarse con medios de delivery que permitan la entrega confiable de los productos. Esta nueva forma de vender requiere que los empresarios y emprendedores consideren dicha asociatividad y tengan esa visión del proceso comercial.
Karin Bravo Fray
Directora de Postgrados y Desarrollo Profesional
Universidad San Sebastián