El Centro Acuático del Estadio Nacional fue el escenario para una actuación inolvidable de Macarena Quero, joven nadadora que viajó desde Concepción para entrar en la historia de los primeros Juegos Parasuramericanos Santiago 2014, convirtiéndose en multi-medallista y una de las seleccionadas nacionales más importantes en la cita deportiva.
Con tan sólo 24 años, la estudiante del Magíster en Actividad Física y Deporte de la Universidad San Sebastián, obtuvo la medalla de oro tras terminar en primer lugar la prueba de 100 metros libres, marcando un minuto, once segundos y cinco centésimas.
Tras adjudicarse la medalla de oro Parasuramericanos Santiago 2014, Macarena declaró que “los primeros 75 metros íbamos todos en grupo, sólo me pude destapar en los últimos 25 metros. Estoy muy contenta porque no pensé que podía ganar. Además, hacía tiempo que no me acercaba a mi marca y, en esta carrera, superé ese tiempo”.
La deportista conoció a su entrenadora, Yazmina Pleticosic, en el Club Campanil en la Octava Región, donde Yazmina era entrenadora. “Practico natación desde los ocho años. Luego de que estudié Educación Física hice muchos cursos de este deporte y entrené a nadadores y triatletas, iniciantes y amateur. Ahí conocí a Macarena y asumí su carrera porque ella no tenía las buenas marcas que deseaba. Ella es la primera deportista de elite que entreno”, señaló.
Macarena Quero participó como nadadora en los Juegos Paralímpicos de Beijing 2008 y los Juegos PanaParamericanos de Río 2007. Aprendió a nadar a los cuatro años con diversos cursos de natación, y empezó a competir localmente desde los 12 años.
A horas de haber conseguido el triunfo, Macarena confesó que “creo que logré esto porque tenía muchas ganar de competir y, junto al equipo y a mi entrenadora, veníamos marcando un buen ritmo de trabajo. Además, nunca había competido en Chile y se nota el apoyo. A pesar de que es una presión mucho mayor, valió la pena. Cuando terminé la competencia me preocupé del tiempo que había marcado, pero al darme cuenta que era la primera sentí una gran sensación, fue un punto culminante de un proceso muy largo”.